Expertos de Pintures Vic remarcan que septiembre y octubre son meses clave para apostar por nuevos tonos y mejorar el confort de los espacios interiores.

Con el final del verano y la llegada del otoño, muchas familias deciden aprovechar el cambio de estación para hacer pequeñas reformas y dar un nuevo aire a su hogar. Una de las opciones más prácticas y asequibles es la pintura, que permite transformar por completo un ambiente con un solo gesto.
 

Según Pintures Vic, empresa referente en el sector con más de sesenta años de experiencia, septiembre y octubre son los meses más recomendables para pintar interiores. “La temperatura es más estable, la humedad más baja y eso garantiza un secado óptimo, sin los extremos del invierno o el verano”, explican desde la compañía.
 

Esta temporada, las tendencias en colores apuntan a tonalidades suaves y naturales como los beiges, verdes y tierras, ideales para crear sensación de calma y bienestar. Al mismo tiempo, los detalles en colores más intensos como azules profundos, terracotas o amarillos mostaza ganan protagonismo en paredes puntuales o elementos decorativos, aportando personalidad y carácter a cada espacio.
 

Otro aspecto a destacar es la creciente demanda de pinturas sostenibles y con bajas emisiones de compuestos orgánicos volátiles (COV). Este tipo de productos, cada vez más presentes en el catálogo de Pintures Vic, responden a la voluntad de los consumidores de cuidar la salud y el medio ambiente sin renunciar a la calidad.
 

Además del asesoramiento técnico y la amplia gama de productos, Pintures Vic recuerda la importancia de preparar bien las superficies antes de pintar y utilizar las herramientas adecuadas para garantizar un resultado duradero y uniforme.
 

Con el inicio del otoño, el mensaje es claro: es el momento ideal para renovar espacios, apostar por nuevos tonos y conseguir que el hogar sea aún más acogedor de cara a los meses fríos.